A los retos del presente y del futuro hay jóvenes que sorprenden al asumir en serio las nuevas tareas.
Teniendo en cuenta el entorno que rodea nuestra bella Montería con la cultura de todo el departamento y uniendo toda mi experiencia de consultor, conferenciante y docente universitario, he quedado sorprendido cómo la nuevas generaciones de jóvenes por su liderazgo y una gran actitud de crecimiento integral, son la respuesta a la exigencia del mercado para crear empresas o ejercer cargos gerenciales en compañías que están posicionando y superando las expectativas de sus clientes.
Adaptándose rápidamente a los cambios y exigencias que la globalización requiere y creando opciones de empleo, construyen empresas que en el pasado fueron un sueño y hoy en día una gran realidad sin dejar de crecer.
Algo tienen en común estos jóvenes; no se conformaron con su realidad, rompieron los esquemas, tienen una disciplina por aprender y leer, desarrollaron ese líder que estaba dormido, una visión que los llevaba a una meta. Se esforzaron haciendo actividades que otros no hacen como estudiar un fin de semana mientras la mayoría está de rumba y ocio. La palabra negocio la tenían en su mente y para mí eso significa alejarse del ocio y empezar a crear.