Montería.- El pasado 26 de septiembre se realizó aquí el segundo foro del ciclo ‘Corrupción en Colombia, lo peor de la violencia’, organizado por Foros Semana, la Embajada de Suecia y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional, Usaid, con el apoyo de Transparencia por Colombia. Se debatieron y analizaron los retos que encara el país y las regiones en la lucha contra la corrupción.
Aunque no se pretendía «echar en cara» todas las irregularidades cometidas por hijos de este departamento, la ocasión era propicia para hacer un «mea culpa» y recriminar a esos mismos malos hijos el daño cometido a la sociedad. «Lo que cometieron el Ñoño Elías y Otto Bula, es apenas un ápice de toda la podredumbre que mantiene a Córdoba en cuidados intensivos», sostuvo un asistente al insinuar que se siguiera ahondando en las investigaciones.
Empero, muchos de los asistentes, cuando empezó a caldearse el ambiente, reconocieron que el tiempo fue insuficiente, que los panelistas se dedicaron a pontificar y a meterse por entre las ramas, sin poner el dedo en la llaga.
En Córdoba, uno de los departamentos más afectados por la corrupción, el debate se centró en la importancia de la veeduría, el control y la sanción que la sociedad civil debe hacer como actor clave dentro de un Estado de Derecho. Además, se destacó el papel que la veeduría ha tenido en la región, y que en esta etapa de pos-acuerdos se hace cada vez más posible. Así lo aseguró Carmen Maritza González Manrique, procuradora delegada para Asuntos Penales de la Procuraduría General de la Nación. «Hace muchos años era imposible hacer un evento de este tipo en esta ciudad, teniendo en cuenta las problemáticas que aquejaban a la región. La lucha contra la corrupción es un trabajo de todos, no solo de los órganos de control».
Los participantes hablaron sobre la necesidad de educar a las comunidades para ejercer esa veeduría ciudadana, «para formar un nuevo ciudadano y convertirlo en un sujeto político», expresó Ricardo Rangel, coordinador técnico del Comité de Seguimiento e Inversión a Regalías y miembro de Cordupaz.
Los panelistas recalcaron que dicha formación debe apuntar a cambiar cuestiones culturales que llevan a actos de corrupción, como lo reiteró Camilo Alejandro Mancera, coordinador jurídico de la Misión de Observación Electoral, MOE: «el primer paso es darle la importancia que tiene participar y votar, sin caer en el acto corruptivo que es vender los votos».