Fallecen dos comunicadores monterianos

Montería.- 2 periodistas monterianos que desde su juventud se iniciaron como locutores y de ahí a comunicadores, fallecieron en fechas distintas del mes de julio. Se trata de Humberto Negrete, quien falleció en una clínica de la capital de Córdoba y Lucho Cano, afectado por el Covid-19, convirtiéndose en otra víctima de la pandemia que azota al mundo.Desde muy niños exteriorizaron su simpatía por la locución y los programas de radio. Se vincularon a los medios hablados sin contar con título alguno. Pero fueron alcanzando conocimiento y experiencia con el trasegar del tiempo. Humberto Negrete disciplinado, cumplidor de su palabra y sobretodo tenía una cualidad que a muchos nos hace falta: saber escuchar. Un paro cardiorrespiratorio cuando apenas promediaba el mes de julio acabó con sus 68 años de existencia y sorprendió a sus cuatro hijos Yulied Patricia, Angélica, Gray, Dayro. Lucho cano en cambio siempre alegre y positivo, no supero los embates del odioso covid-19 y en un dos por tres lo mandó a la tumba sin que hubiera tiempo siquiera de despedirlo a su última morada debido a las limitaciones impuestas por esta enfermedad. Lucho Cano conquistó desde muy joven una gran audiencia radial por su voz sonora y la facilidad con que llegaba a los oyentes de las diferentes emisoras a donde prestó sus servicios. Lucho igual que Humberto aprendieron a hacer entrevistas, a hacer reportaría y a elaborar noticias como alumnos adelantados del conocimiento empírico.
Humberto incursionó en programas y noticieros de RCN, Panzenú, Voz de Montería, en el semanario La Piragua y TV5 todos de Montería.
Lucho cano de 75 años, fue presentador de importantes eventos, animador, asistió a numerosos seminarios y simposios de periodismo en Caucasia, Medellín y Montería y hasta fundó un periódico alternativo que sacaba en medio de dificultades financieras. Pero ante todo siempre se mostraba optimista y liquidaba las malas noticias y los malos tiempos con su buen talante de siempre. Se han ido dos amigos del corazón, dos colegas humildes y sencillos que a su manera supieron dejar enseñanzas y buenos ejemplos.

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