Se trata de una reliquia arquitectónica de la vieja Montería que pide a gritos su restauración para mantenerse en pie. Los últimos 3 alcaldes ni fu ni fa.
Montería.- Hace unos 80 años, (1942), fue construido el Mercado Central de Montería, llamado también de Los Cuatro Patios. La obra estuvo dirigida por el ingeniero José Luis Zorrilla. En esa época Montería pertenecía a Bolívar, y el mercado, fue considerado uno de los mejores centros comerciales del Caribe colombiano. Desde ese entonces hasta la presente, que se sepa, no le han hecho remodelación. A pesar de que la mayoría de los alcaldes, cuando están en campaña, prometen reconstruir las viejas instalaciones del mencionado mercado ubicado en la avenida primera con calles 35 y 36. El último de ellos fue el actual mandatario Carlos Ordosgoitia, quien incluyo al Mercado Central entre las obras emblemáticas que serían construidas o remodeladas, “pero ya está que finaliza su mandato y no le ha metido un solo peso”, dicen los pequeños comerciantes del lugar. Como si lo anterior fuera poco, el 4 de marzo se cumplen dos meses de haberse caído (el 4 de enero pasado) parte del techo de la edificación en el sector oriental de la vetusta obra en la capital cordobesa. Fueron 30 por 15 metros del techo que se vino abajo ese día a comienzos del presente año. Y aunque la administración municipal prometió reparar los daños, hasta el momento no ha habido solución a ese problema.
Eso ocasiona que por lo menos diez de los 200 comerciantes informales, del lugar, resultan más afectados las veces que llueve. Por ejemplo, en los primeros días del mes de enero estuvo lloviendo, y un mes después, en febrero, también hubo fuertes aguaceros. Lo peor del caso es que desde hace unos tres años, o sea en la administración actual, no ha existido una persona que administre ese sitio para que pueda estar pendiente de lo bueno o lo malo que ocurra en el lugar. Los pequeños comerciantes aseguran que como consecuencia del accidente han perdido los productos que dedican a las ventas para el sustento de sus familias que residentes en barrios de escasos recursos económicos en Montería. Una de esas comerciantes es Yaneth Carvajal, mujer vendedora de comida que abundan en esa parte del centro de Montería. Ella dice que desde el día que hubo el accidente han disminuido las ventas, ya que mucha gente tiene miedo que les vaya a caer algún pedazo de madera o una lámina encima. Otro de los comerciantes informales es el radiotécnico Luis Gómez, quien precisa que existen días que no hace ni para la comida, puesto que son muy pocas las personas que se acercan a buscar el servicio, por el temor que reviste el lugar. Para protegerse del sol y del agua, don Luis tuvo que poner un pequeño techo en la colmena.En ese mismo contexto se expresó Filadelfo Quiñonez, quien se dedica a reparar equipos electrodomésticos, en su pequeño puesto donde tiene una pieza por aquí y otra por allá. El techo de la colmena fue destruido por completo el día que se cayó parte del techo de la plaza del mercado. Todos argumentan que tienen miedo que la temporada de lluvias se adelante, y como consecuencia afecte a los representantes de las diez familias que resultaron damnificadas a raíz de la caída del techo. Esas familias no tienen otro sustento que el devengado en los pequeños negocios. Los afectados aseguraron que, desde las administraciones de Marcos Daniel Pineda García, Carlos Eduardo Correa y ahora en la de Carlos Ordosgoitia, prometieron la reconstrucción de ese sector, pero todo ha quedado en puras promesas. En tal sentido, los comerciantes informales afectados por el incidente, esperan que el alcalde Ordosgoitia, ordene la reparación del mencionado lugar lo antes posible, y que no vaya a suceder que deje pasar los 10 meses que le quedan de mandato. Además, todos los pequeños comerciantes están preocupados porque en cualquier momento, no o permita Dios, les puede caer todo el techo encima.
