Aunque los escenarios en que se realizaron los macabros hechos son diferentes: uno rural y el otro urbano, la muerte del ganadero Esteban Rafael Urueta González y de los dos administradores de fincas, Gerardo Marzola Coronado y Fredy Beleño Acosta, en Carolina, Chimá, tiene similitud con la del exdirector de regalías de Córdoba, Jairo Alberto Zapa Pérez, ocurrida en Montería.
En el caso de Zapa Pérez, este, fue estrangulado el 27 de marzo de 2014 en el barrio La Castellana de Montería. El delito fue cometido por el ex paramilitar contratado en el Magdalena, Joyce Rafael Hernández Muñoz. No hubo uso de arma de fuego.
Un mes después se realizaron las capturas de seis personas en Montería, Cartagena y Santa Marta. Por lo menos tres de estos, entre los que está el determinador Jesús Eugenio Henao Sarmiento, estuvieron involucrados en el tenebroso crimen.
El cadáver de Zapa fue hallado cuatro meses después en una finca del municipio de Pueblo Nuevo, por indicaciones del propio sicario Hernández Muñoz, quien llevó a los miembros del CTI hasta el lugar, tras haber hecho un preacuerdo con la Fiscalía que le permitiera rebajar la pena.
A Henao Sarmiento la justicia lo condenó a más de 42 años de presión como determinador del homicidio de Zapa Pérez. Mientras que Zuan Nayduth López Acevedo, paga una pena de más de 40 años y Hernández Muñoz está pagando solo 23 años, debido al acuerdo con la Fiscalía. Hernández y López Acevedo son pareja.
Mientras que, al ganadero y sus empleados los mataron con arma contundente en una finca del corregimiento Carolina, municipio de Chimá. Sobre esto, hay versiones de Beleño Acosta recibió disparos de arma de fuego. En los asesinatos habrían participado varias personas, entre ellas Cristian Mauricio Petro Almanza y Juan Fernando Soto Garcés
Existen versiones de que los dos indiciados habrían sido retenidos por el Gaula de la Policía el 11 de septiembre. También se comenta que los asesinos se habían entregado porque pretenderían buscar acuerdo con la Fiscalía.
Al comienzo circuló otra versión de que los integrantes de la institución oficial se habían disfrazado de paramilitares para llevarse a los dos hombres. Pero esta aseveración fue desmentida por el comandante del Gaula de la Policía, coronel Elver Vicente Alfonso Sanabria.
Los cuerpos sin vida fueron encontrados en un predio de Carolina, Chimá, en inmediaciones de la ciénaga Grande del Bajo Sinú. El hallazgo lo hizo el Gaula de la Policía y el CTI de la Fiscalía por confesión de los presuntos homicidas. Esa zona limita con Cereté, San Pelayo, Cotorra y Ciénaga de Oro.
Los indiciados Petro Almanza y Soto Garcés quedaron en libertad el 13 de septiembre por no haber sido presentarlos ante la Fiscalía. Pero el Gaula se reivindicó rápido y el 22 de septiembre, después de un gran trabajo de inteligencia, capturó a los dos hombres en el barrio Nuevo Bosque de Cartagena. Los sujetos fueron trasladados a Montería para presentarlos en audiencia.
Los restos mortales de Zapa Pérez fueron enviados al Instituto de Medicina Legal en Medellín para los estudios de ADN (Ácido desoxirribonucleico), los devolvieron después de haber pasado un mes. Con los cadáveres de las tres personas ultimadas en Carolina, ocurrió lo mismo.
Aunque los cuerpos sin vida de Urueta González y de uno de los empleados, Marzola Coronado, fueron entregados a sus familiares el lunes 16 de septiembre, quienes les dieron cristiana sepultura el miércoles 17 del mismo mes en Sincelejo y Pueblo Nuevo, respectivamente.
Los restos de Fredy Beleño Acosta continúan en la ciudad de Medellín ya que para los médicos forenses ha sido difícil identificarlo con precisión, pues el cadáver fue incinerado. El fiscal Fredy Escobar Paternina informó que este cuerpo recibió dos disparos de arma de fuego, uno en la cabeza y otro en el tórax.
En caso Zapa había de por medio mucha plata, se llegó a hablar de 90 mil millones de pesos en contrataciones anuales de recursos de regalías. En el asunto del ganadero Urueta las autoridades investigan la pérdida de 700 cabezas de ganado. Las 700 reses podrían costar alrededor de 3 mil millones de pesos.
Dicen que las comparaciones son odiosas, pero estos terribles hechos, tienen mucha similitud. El proceso de Zapa Pérez demoró diez años en manos de la justicia para ser resuelto. Pero, ¿cuántos años demorará la investigación de los asesinatos de los tres hombres en el municipio de Chimá?
